La fibrosis quística es considerada una enfermedad rara que se estima que afecte a 70-100 mil personas en todo el mundo, sin embargo, es notablemente más prevalente en los europeos. ¿en qué consiste exactamente esta enfermedad tan desconocida para la mayoría de las personas.

 

¿Qué es la fibrosis quística?

 

La fibrosis quística es una enfermedad de origen genético crónica y hereditaria que provoca una acumulación de secreciones anómalas en diferentes órganos, afectando especialmente a los aparatos respiratorio y digestivo.

Hay que tener precaución para que  no cause problemas más graves en los órganos. Esta patología puede derivar en otros problemas como la EPOC en los pulmones o insuficiencia pancreática en el sistema digestivo.

Muchas enfermedades crónicas como ésta, no tienen una cura, pero pueden tratarse para mejorar la calidad y expectativa de vida de las personas que la padecen.

 

Tipos

 

Existen diferentes tipos de fibrosis quística en función de los órganos que se vean más afectados por ellas.

 

Fibrosis quística pulmonar

En esta tipología, las secreciones bloquean las vías aéreas más pequeñas de los pulmones, provocando inflamaciones e infecciones de diferente tipo, que pueden provocar neumonías, bronquitis, insuficiencia respiratoria, etc.

 

Fibrosis quística en el páncreas

Sucede cuando los que se obstruyen son los conductos del páncreas, afectando a la digestión de proteínas y grasas. Se identifica a través de la gran cantidad de grasa que se presenta en las heces y pudiendo resultar en una pancreatitis crónica.

 

Fibrosis del hígado

En esta tipología de fibrosis quística se pueden ver anormalidades en las pruebas sanguíneas y grasa en el hígado. Pueden producirse enfermedades hepáticas o una fibrosis severa, también conocida como cirrosis.

 

Diagnóstico y síntomas de la fibrosis quística

 

Al tratarse de una condición genética, es posible realizar pruebas a los recién nacidos para detectar la alteración que causa la fibrosis quística. Lo habitual es que ésta sea identificado antes del primer año de vida.

Se pueden identificar algunos síntomas que pueden no manifestarse hasta la adolescencia o la adultez.

  • Sudor salado
  • Fatiga
  • Pérdida de peso
  • Estreñimiento
  • Tos persistente, congestión nasal e infecciones respiratorias frecuentes
  • Dolor del estómago
  • Heces con mal olor
  • Sinusitis, rinitis o pólipos nasales
  • Retraso del crecimiento

 

Además, las personas nacidas con fibrosis quística es frecuente que presentes malformaciones y agrandamiento de los dedos.

 

Posibles complicaciones

 

Además de las complicaciones que pueden derivar de esta patología, la mayoría de las personas que sufren esta patología también tienen una menor densidad ósea, siendo más propensos a sufrir fracturas, debido a la osteopenia.

También pueden surgir complicaciones como la EPOC o la pancreatitis derivadas de esta enfermedad

 

Esperanza de vida de las personas con fibrosis quística

 

La esperanza de vida de las personas con esta patología es diferente en función de la calidad del sistema sanitario de cada país. Su esperanza de vida está en algo más de 45 años.

 

Tratamiento

 

La fibrosis quística, al ser una enfermedad genética, y al tratarse de una enfermedad sin cura conocida, los tratamientos consisten en reducir los efectos de los síntomas en la medida de lo posible y ralentizar la evolución de la enfermedad

Estos tratamientos, aunque no curan la enfermedad, ayudan a que la persona pueda tener una mayor calidad de vida y aumentar su esperanza de vida.

 

Cuidado de personas con fibrosis quística en el hogar

 

Los cuidados de una persona con fibrosis quística se pueden realizar en el hogar, pero es necesario tener en cuenta algunas consideraciones para que la persona que lo padece pueda tener la mejor calidad y esperanza de vida posible.

 

·        Eliminación de químicos de uso doméstico, alcohol y tabaco.

·        Limpieza frecuente para eliminar moho, hongos, polvo y suciedades

·        Realizar ejercicios con el paciente de dos a tres veces a la semana.

 

Además, deben hacerse revisiones y controles de forma periódica para un mejor pronóstico y calidad de vida de la persona.

Recuerda también que, si necesitas a una cuidadora que te ayude en el cuidado, en Depencare, aunque estamos especializados en el cuidado de personas mayores, podemos ayudarte proporcionándote una cuidadora especializada en aquello que necesites.

Miguel Mateos Beltrán
Nº Colegiado 2828 41033 (ICOMEM Ilustre Colegio Oficial de Medicos de Madrid)

Licenciado en medicina y cirugía por la prestigiosa Universidad de Salamanca. Especialista en Medicina de Familia con más de 34 años de experiencia en Medicina Familiar y Comunitaria, diplomado en Orientación Familiar.  Además, diplomado en Dietética y Nutrición humana.