Cuando hablamos de la fatiga crónica nos referimos a una afección común entre las personas mayores que afecta gravemente a su calidad de vida y que se estima que afecta a más de 300.000 personas en España.
Índice
¿Qué es la fatiga crónica?
El síndrome de la fatiga crónica o encefalomielitis miálgica, es una enfermedad neurológica que causa un cansancio persistente y sin razón explicable. Esta fatiga afecta a nuestras funciones motoras y no motoras.
La fatiga crónica se caracteriza por un agotamiento que no disminuye con el paso del tiempo ni cuando permanecemos en reposo, afectando a la persona que lo sufre a diferentes niveles: cardiovascular, endocrino, inmunológico y neurológico.
Síntomas del síndrome de fatiga crónica
La fatiga crónica, como su propio nombre indica, se caracteriza por la aparición de fatiga y cansancio sin causa aparente, que debe alargarse durante más de 6 meses para poder diagnosticar si se trata realmente de fatiga crónica. Además de esta característica, existen otros síntomas que pueden acompañar a esta patología:
- Falta de concentración o pérdida de memoria a corto plazo
- Faringitis
- Dolor en las articulaciones sin ser artritis
- Dolor muscular
- Dolor de cabeza intenso
- Trastornos del sueño
- Malestar de más de 24 horas tras realizar un esfuerzo físico
- Inflamación de los ganglios
Factores de riesgo
Existen varios factores que favorecen la predisposición hacia la fatiga crónica, los más comunes son los siguientes:
- Genética: existe predisposición genética hacia la fatiga crónica
- Mujeres: la fatiga crónica afecta entre 10 y 20 veces más a las mujeres que a los hombres.
- Patrones de conducta: las personas con un carácter perfeccionista, obsesivo, hiperactivas o inestables emocionalmente tienen una mayor predisposición a sufrir de este síndrome.
- Ejercicio físico: las personas sedentarias también tienen una mayor predisposición a verse afectados por la fatiga crónica.
- Flexibilidad: la denominada hiperlaxitud ligamentosa, es decir, tener una mayor flexibilidad en tendones y articulaciones, tiene una base genética que predispone hacia la fatiga crónica, especialmente en las mujeres.
Grados de afectación del síndrome de fatiga crónica
Este síndrome puede afectar a las personas de diferente manera, catalogándose en 3 fases o grados diferentes.
- Grado I: la posibilidad de realizar actividades físicas y cognitivas se ve reducida en un 50% respecto a lo que se podía realizar antes de padecer la enfermedad.
- Grado II: la persona ve restringida su vida al domicilio y su actividad se limita a una tercera parte de lo que podía realizar anteriormente. Además, se trata de una fatiga es persistente y sin mejora.
- Grado III: necesidad de permanecer en cama la mayor parte del día e imposibilidad de realizar cualquier tipo de actividad.
Además, la fatiga crónica puede ser causa justificada de discapacidad, el grado II se corresponde con un 25 a 59% de discapacidad y el grado III de un 60 a un 75%.
Diagnóstico de la fatiga crónica
En la actualidad no existe ninguna prueba que permita saber a ciencia cierta si una persona sufre del síndrome de fatiga crónica. Habitualmente para su diagnóstico se usando los llamados “Criterios de Fukuda” que han sido aprobados por la OMS y que se basan en lo siguiente:
- Persistencia de un mínimo de 6 meses de fatiga crónica o reincidente que no se puede explicar y que no es atribuible a esfuerzos recientes.
- No presentar otras patologías que puedan ser causa de la fatiga.
Además, el paciente debe presentar de forma simultánea 4 de los 8 síntomas que hemos mencionado anteriormente, durante un periodo de 6 meses.
Tratamiento de la fatiga crónica
No existe ningún tratamiento que permita curar esta enfermedad, por lo que los esfuerzos se dedican a paliar los síntomas y así mejorar la calidad de vida bienestar de la persona.
Cuidado de adultos mayores con fatiga crónica
El apoyo de una cuidadora a domicilio puede ser de gran utilidad para una persona con fatiga crónica. La ayuda de una cuidadora puede facilitar la ejecución de ejercicios en el día a día, así como la realización de diferentes tareas que contribuyan a la calidad de vida y bienestar de la persona a atender.
